martes, 19 de agosto de 2014

Último beso en Lisboa

Atardece en la bahía
y en tus ojos se refleja la mirada
de los años pasados.
Sublime y melancólica,
me observa a fuego lento
como una canción de fado.

Recorremos las calles estrechas de Lisboa
recordando con ternura nuestros abrazos.
Jugando a no querernos,
pero tratando furtivamente de rozarnos.
Mis labios rebeldes se obstinan en besarte.
- Es el último - te digo.
y la saliva de mi mentira
humedece el penúltimo arrebato
de tratar de volver a tocar el cielo
que se abre sobre las decadentes casas
del Bairro Alto.

Te miro entre la bruma y te hago promesas
de recorrer un país sin rumbo en furgoneta.
Y viajamos.
Protegidos por la seguridad de nuestra propia compañía.
Durmiendo sobre acantilados.
Viviendo durante el día sobre la cálida arena de playas olvidadas.
Cenando entre risas con sabor a vino verde.
Contemplando los atardeceres abrazados,
entre los latidos asimétricos
de nuestros corazones desacompasados.





No hay comentarios:

Publicar un comentario